Cuantificación de la medida global y distribución regional del tejido adiposo con la imagen por resonancia magnética (irm) y tomografía axial computada (tac)efectos de la dieta y el entrenamiento de fuerza

  1. IDOATE SARALEGUI, FERNANDO
Dirigida per:
  1. Javier Ibáñez Santos Director/a
  2. Mikel Izquierdo Codirector/a

Universitat de defensa: Universidad de Navarra

Fecha de defensa: 17 de de desembre de 2010

Tribunal:
  1. Cecilia Dorado García President/a
  2. José Luis Zubieta Zárraga Secretari/ària
  3. Jesús Dámaso Aquerreta Beola Vocal
  4. Joan Carles Vilanova Busquets Vocal
  5. Armando Malanda Trigueros Vocal

Tipus: Tesi

Teseo: 111599 DIALNET

Resum

OBJETIVOS En el presente estudio de investigación se pretende comprobar la capacidad del TAC y fundamentalmente de la IRM para cuantificar la medida global y distribución regional y compartimental de tejido adiposo. En segundo lugar, se planteará un nuevo método informático de segmentación automática de tejido adiposo y muscular en imágenes de IRM. MATERIAL Y MÉTODOS Nueve pacientes (edad 66.6-3.1 años) con DM II participaron en un programa supervisado de entrenamiento de fuerza (PRT) de 16 semanas de duración. Se midió la grasa abdominal con imágenes obtenidas con TAC. Las mediciones se realizaron cuatro semanas antes y en las semanas 8 y 16 del período de entrenamiento. Se reclutaron 34 mujeres obesas (IMC: 30¿40 kgm2), edad 40¿60 años, que fueron distribuidas aleatoriamente en 3 grupos: grupo control (C; n=9), grupo dieta (D; n=12) y grupo dieta+ejercicio de fuerza (D+E; n=13) con la misma dieta que el grupo D y PRT durante 16 semanas. En todos los pacientes se midieron la glucemia basal, HbA1c, dieta, actividad física habitual, composición corporal, fuerza máxima de extremidades y sensibilidad a insulina. Se desarrolló un método automático de segmentación desarrollado en Matlab. Para evaluar el nuevo método se segmentaron 1500 imágenes de RM de 30 pacientes obesas. Un radiólogo experto segmentó el mismo sets de imágenes con un procedimiento manual con el programa SliceOmatic (Tomovision). Se midió el número de pixeles coincidentes entre la segmentación manual y la automática. RESULTADOS En los pacientes con DM II, después del PRT la fuerza máxima aumentó significativamente tanto en el brazo como en la pierna en un 17,1 y 18,2%, respectivamente. El TAV y TAS disminuyeron significativamente en un 10,3% y 11,2%, respectivamente, mientras que no se observaron cambios en la masa corporal. En las pacientes obesas el programa de D+E produjo cambios significativos en la localización del nivel con mayor área de VAT que pasó del nivel discal L3-L4 preintervención al nivel discal L2-L3 postintervención. El área de mayor pérdida relativa de TAV se localizó a nivel discal L5-S1 en el grupo D, mientras se localizó a nivel L2-L3 como resultado de D+E. Tanto en el grupo D como en el grupo D+E, antes y después de la intervención, el nivel con la correlación más alta con el volumen total del TAV o con la pérdida del TAV se encontró a nivel discal L2-L3 (~ 5-6 cm por encima de L4-L5). El TAV a nivel L4-L5 fue el área más estrechamente asociada con deterioro de muchos de los componentes del riesgo cardiometabólico. Después de 16 semanas de la intervención el patrón de asociación entre la grasa abdominal y las variables de metabolismo de la glucosa mostraron un cambio de la región L4-L5 al TAV L2-L3 y SAT L2-L3 en los grupos D y D+E, respectivamente El programa de segmentación automática mostró un número de píxeles coincidentes con los obtenidos con el procedimiento de segmentación manual de más del 90% de éxito. CONCLUSIONES Dos sesiones por semana de PRT, sin una dieta para bajar de peso concomitante, mejoran significativamente la sensibilidad a la insulina y la glucemia en ayunas y disminuye la grasa abdominal en hombres mayores con DM II. Diferentes regímenes de pérdida de peso puede llevar a una distribución diferente de TAV. Localizaciones craneales a L4-L5 ( 5-6 cm por encima de L4-L5 o a nivel discal L2-L3), permiten una predicción mas adecuada del volumen total del TAV abdominal, mientras que sectores más caudales ofrecen una mejor predicción de la grasa subcutánea, no sólo antes sino también después de D o D+E. El TAV a nivel L4-L5 fue el nivel con mayor correlación con perfil de riesgo cardiometabólico en mujeres obesas, y el nivel L2-L3 mostró la mayor correlación con la resistencia a la insulina después de una D y D+E. El método propuesto permite la segmentación efectiva automático de tejidos reflejado en las imágenes de RM del muslo, con resultados comparables a los obtenidos manualmente por expertos.