La epidemia de cólera de 1885 en navarra y en tudela

Zusammenfassung

La enfermedad epidémica perturba dramáticamente la vida y la convivencia de un grupo humano. Estudiamos la epidemia de cólera que en 1885 afectó a Navarra y fundamentalmente a la ribera de Tudela. Conoceremos las disposiciones dictadas por el Gobernador Civil, la Diputación Foral y los ayuntamientos de higiene pública y privada y analizaremos la realidad y las consecuencias de los cordones sanitarios. Describiremos el ejercicio profesional, la problemática hospitalaria, las dificultades de la organización asistencial y las desavenencias sociales que se derivaron. También analizaremos los conocimientos médicos sobre el cólera, reflexionaremos sobre la celebración del Congreso Médico Navarro, (1886) y descubriremos la transmisión de la Ciencia. Para el estudio de la epidemia combinamos las fuentes de archivo administrativas (estadísticas oficiales, registros realizados en Tudela, instrucciones y circulares gubernamentales), prensa local, revistas médicas (memorias y estudios) y documentación secundaria. El Boletín Estadístico Sanitario Demográfico informa que el 53,13% de la población navarra estuvo expuesta al cólera, hubo 12.895 invadidos, (el 7,9 % de los expuestos) y fallecieron 3.261. La epidemia comenzó el 25 de julio en Tudela, duró 105 días y finalizó el 6 de noviembre en Ansoain. Se propagó siguiendo el curso de los principales ríos. Tudela fue, el partido más afectado con el 46,9 % del total de invadidos y el 51,5% de los fallecidos. Le siguieron el de Tafalla, Estella, Aoiz y Pamplona. El cólera mató más a las mujeres que a los hombres. Los fallecidos tenían entre (40-60) y (25-40) años. Ejercían las profesiones de ama de casa o jornaleros y pertenecían a una clase social baja. Tudela sufrió dos envites, el primero entre el 25 de julio y el 8 de octubre y un rebrote los días 18 y 20 de noviembre. Las cifras que ofrecen los ocho registros no coinciden. Hubo errores en la cumplimentación pero no manipulación. Aproximadamente fueron 843 invadidos y 352 fallecidos. La sociedad vivió atemorizada por el contagio. La epidemia comenzó el 8 de junio de 1884 en Tolón (Francia) y se acordonó la frontera con Navarra. El cordón originó grandes pérdidas económicas. El 17 de julio de 1885, se impuso el cordón provincial y se suspendió al declararse el cólera en la provincia. En Tudela, se aplicó el cordón sanitario, la extracción del estiércol, la limpieza de los cauces y la prohibición de riegos. Los gastos y las pérdidas económicas fueron asumidos por los ayuntamientos y por los particulares. Los enfermos rechazaron la hospitalización y los hospitales a los coléricos por lo que se tuvieron que habilitar locales. El Congreso Médico Navarro (Tafalla 22, 23 y 24 de marzo de 1886) se enmarca en el movimiento internacional que promovió la Salud Pública. Los objetivos del Congreso fueron: Contribuir al progreso de la Ciencia; conocer las leyes que rigen las epidemias; reseñar la epidemia sufrida y recordar a la Administración las inversiones en obras de saneamiento de las poblaciones. Los asistentes conocían los descubrimientos microbiológicos pero debatieron otras etiologías. Admitían la vía de trasmisión atmiátrica, que las aguas fluviales servían de vehículo para un germen que necesitaba una preparación telúrica para ser patógeno y que no era directamente trasmisible de persona a persona. Para evitar la propagación recomendaban el saneamiento urbano. El cordón sanitario era un medio seguro y efectivo pero impracticable, perjudicial y ruinoso para las poblaciones. Respecto a la patología de la enfermedad reconocían que el periodo de incubación era breve, la diarrea premonitoria permitía la detección precoz de la epidemia, existían formas fulminantes y que contraer la enfermedad confería inmunidad relativa. Se aplicaron el tratamiento clásico (opio y estimulantes cardíacos) y el evacuante. La vacuna fabricada por Jaume Ferrán no se utilizó en Navarra. La epidemia tuvo un desarrollo desigual: afectó fundamentalmente a la ribera de Tudela. Los hortelanos y los jornaleros de la ribera tudelana, sufrieron importantes pérdidas. La epidemia provocó el cese del Gobernador. El cólera, alentó los movimientos fueristas que culminaron en La Gamazada. El cólera evidenció la falta de médicos y de consideración hacia ellos. El Congreso Médico Navarro debatió sobre el higienismo, reivindicó las reformas sanitarias e impulso la Salud Pública en Navarra. Muestra la rapidez de la transmisión de la Ciencia, desde los lugares en que se producían los descubrimientos hasta los médicos prácticos rurales.