Historia, exégesis y fundamentos de la obligación de participar en la misa dominical

  1. CARALHO LUGLI ALEXANDRE DE
Dirigida por:
  1. José Antonio Fuentes Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Navarra

Fecha de defensa: 13 de noviembre de 2001

Tribunal:
  1. Eloy Tejero Tejero Presidente/a
  2. Juan González Ayesta Secretario/a
  3. Daniel Cenalmor Palanca Vocal
  4. José Antonio Fuentes Vocal
  5. Gerardo Núñez González Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 91876 DIALNET

Resumen

A través de la análisis de cerca de 140 fuentes de carácter jurídico, emanadas a lo largo de los veinte siglos de historia de la Iglesia, concluimos que la obligación universal de participar en la Misa dominical fue continuamente legislada y gravemente exigida por la autoridades eclesiásticas. Por eso, es necesario matizar la afirmación de diversos autores, de que la obligación de participar en la Misa dominical sólo llegó a ser una norma universal a partir del CIC 17. Ciertamente, de hecho y de derecho, tal obligación siempre estuvo presente en el derecho común de la Iglesia, aunque expresada en modos diversos, por ejemplo, en la concordancia universal de las leyes particulares. El estudio del proceso de elaboración de los cánones del CIC 83 y del CCEO que tratan del deber de participar en la Misa dominical y su exégesis, permite concluir que la normativa acutal es fiel a la tradición canónica. Por fin, en lo que atañe a la naturaleza de esta obligación, debido a los innumerables fundamentos históricos, teológicos y jurídicos que sustentan tal deber, pensamos que aplicar la expresión "meramente eclesiástico", refiriéndose al primer mandamiento de la Iglesia, podría dar lugar a equívocos. Efectivamente, a pesar de ser un precepto eclesiástico, no parece que esta obligación pudiera ser modificada, sin atentar contra un elemento esencial de la tradición cristiana. Por eso, el autor juzga que la obligación de santificar el día del Señor, con la participación en la Misa, debe ser considerada como norma permanente.