La búsqueda de una identidad. La escultura entre el gremio y la academia. 1741-1833
- María Concepción García Gaínza Directeur/trice
Université de défendre: Universidad de Navarra
Fecha de defensa: 14 décembre 2000
- Víctor Nieto Alcaide President
- Ricardo Fernández Gracia Secrétaire
- Cristóbal Belda Navarro Rapporteur
- Carlos Sambricio Rivera Echegaray Rapporteur
- María Antonia Frías Sagardoy Rapporteur
Type: Thèses
Résumé
En el siglo XVIII español nos encontramos con una importante reflexión en torno a diferentes categorias con las que se quiere dotar de identidad propia a la monarquía y por lo tanto al Estado, de forma que. Una bandera, un himno, pero también determinados nombres de las ciencias, la historia y por supuesto del Arte. Son buscados codificados e instrumentalizados como signos de indentidad. En este sentido, resulta pradigmática el caso de la escultura española, tradicionalmente en madera policromada y de temática religiosa, que va a pasar a ocupar un papel de primer orden en las necesidades representativas de la monarquía y del Estado. El presente estudio ha pretendido por ello establecer el auténtico alcance de la relación de los dos ámbitos que durante la edad moderna fueron determinantes para la formación de los artistas: el gemio y la Academia. Dos entidades condicionadas e instrumentalizadas en distinta medida por ese afán de los proyectistas ilustrados de mejorar la cualificación de los artífices españoles. En segundo lugar hemos podido comprobar hasta qué punto la enseñanza académica de la escultura se considera complementaria de la racibida en los talleres estudio privados, lugar donde en difinitiva termina por conformarse sobre todo la personalidad artística de los escultores a partir de la relación con su maestro. Un tipo de relaciones que gracias a la iniciatia de los historiógrafos de la Academia de San Fernando, se ve engarzada plenamente con una tradición que se codifica y articula en una historia del Arte, y por lo tanto de la escultura, del que el Diccionario de Cean Bermúdez es su máximo exponente. Así el academicismo español simila los presupuestos coetáneos de Winckelmann pero con una carga de contingencia, la que pasa por el sentido de historicidad enarbolado por las elites políticas borbónicas en todas las Academias que promovieron.