Joy and sorrow in the gospel of St. John
- TAPEL RENE, OLIVER
- Gonzalo Aranda Pérez Director/a
Universidad de defensa: Universidad de Navarra
Fecha de defensa: 06 de febrero de 2002
- Gonzalo Aranda Pérez Presidente/a
- Ramiro Pellitero Secretario
- Antonio García-Moreno Vocal
- Juan Chapa Prado Vocal
- Joselito Jose Alviar Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Un aspecto prominente en el Evangelio de San Juan es el tipo de dualismo que presenta. Como evidente en la serie de polaridades simbólicas en el Evangelio, por ejemplo, luz y oscuridad, arriba y abajo, cielo y tierra, Dios y el demonio, vida y muerte, verdad y falsedad, este dualismo joánico se apunta no sólo para presentar a la audiencia y a los lectores alternativas de la fe o de la incredulidad en que ellos viven, sino también para conducirles a tomar una decisión ante Cristo, y su revelación. La tesis sobre el Cuarto Evangelio por Rene Oliver Tapel, Titulada, "Joy and Sorrow in the Gospel of St. John" (La alegría y la Tristeza en el Evangelio de San Juan), es una investigación de la alegría (chara, palabra griega preferida de San Juan), y la tristeza (lupe, palabra griega preferida del evangelista), como otro posible símbolo dualista joánico, aunque no es tan prominente como los citados previamente. Dividido en tres partes, el estudio considera primero en la parte inicial la vista panorámica posible del concepto joánico de alegría. Se presenta en el primer capítulo el concepto de alegría en el mundo Griego clásico, Judaísmo y Nuevo Testamento. La segunda parte (cap. 2-6), que evidentemente compone la mayor parte del estudio, se centra en el estudio literario-crítico, y como funcionan estos conceptos en el Evangelio. El capítulo 2 empieza con una examinación del vocabulario joánico de alegría y, desarrolla la fe en la persona de Cristo como causa importante y fuente de la alegría. Puesto que sólo es Cristo quien puede dar descanso al deseo humano con una alegría permanente, pues, es la fé en Él, la que hace posible la entrada y la participación en su alegría verdadera. Y por la sublime razón de que es la fe que conduce a uno al amor de Cristo, pues, el amor o la caridad se considera también como otra causa o fuente de alegría. No puede ser por el que ama a Cristo no tener la alegría de Cristo. Evidente