Forma y tectonicidadestructura y prefabricación en la obra de Gordon Bunshaft

  1. Sica Palermo, Humberto Nicolás
Dirigida por:
  1. Cristina Gastón Guirao Director/a

Universidad de defensa: Universitat Politècnica de Catalunya (UPC)

Fecha de defensa: 22 de noviembre de 2012

Tribunal:
  1. Heliodoro Piñón Pallarés Presidente/a
  2. Robert Terradas Muntañola Secretario/a
  3. Maria da Garça Ribeiro Ragazzi Vocal
  4. Miguel Ángel Alonso del Val Vocal
  5. Félix Solaguren-Beascoa de Corral Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 114788 DIALNET lock_openTDX editor

Resumen

Las obras del arquitecto Gordon Bunshaft, desarrolladas mientras trabajó en la empresa multinacional S.O.M. - Skidmore, Owings & Merrill - agrupan una serie de atributos constructivos y formales que reflejan la modernidad y el ámbito en el cual alcanzó su máxima expresión artística. La Lever House, acabada en 1952, atrajo fama y encargos a la firma, transformándose en uno de los paradigmas para la concepción de edificios de oficinas modernos. Sin embargo, la evolución de los procesos proyectuales y constructivos de S.O.M. generaron una considerable variedad de soluciones formales producidas durante los años cincuenta. La estructura laboral de la empresa se basaba en tres aspectos básicos: la arquitectura moderna, los métodos organizacionales estadounidenses y el dominio y desarrollo de las técnicas y materiales constructivos industrializados disponibles. Ya hacia los años sesenta, los proyectos de S.O.M. pasaron a tener estructuras soportantes más expresivas y refinadas técnicamente, potenciando atributos formales y adquiriendo más funciones de lo que las usuales. La oficina de Nueva York, con Gordon Bunshaft a la cabeza, fue la primera en introducir unidades prefabricadas de hormigón en sus proyectos, originando la mayoría de las aplicaciones posteriores del material. La práctica de Bunshaft y su equipo apuntó desde un principio a la explotación del material en sistemas soportantes, teniendo siempre como precedentes aquellas experiencias con estructuras de acero que acabaron por revelarse exitosas. En medio a ese contexto, y muy en función del uso del material, se construyeron edificios en los cuales el sistema estructural prácticamente determina la forma resultante. El arquitecto empleó básicamente dos tipos de estructuras en sus proyectos con elementos de hormigón prefabricados: entramados soportantes de perímetro - componentes soportantes verticales que se plasmaron en los edifícios para la John Hancock Company en Nueva Orleans y para el Banco Lambert en Bruselas - y forjados unidireccionales sobre apoyos continuos - componentes soportantes horizontales a edificios como el American Can Company en Greenwich, el American Republic Company en Des Moines, y en la propia casa del arquitecto en East Hampton. La economía de medios y soluciones adoptadas, la repetición ordenada de estas soluciones y la precisión en la ejecución generan la consistencia visual y formal de los edificios, que tienen como indudable rasgo característico una clara tectonicidad. Además de originarse en los sistemas estructurales compuestos por elementos prefabricados de hormigón, la tectonicidad característica en la obra del arquitecto también se percibe en el diseño de las piezas, en la manera como se unen y en los acabados utilizados sobre ellas. Como afirmaba el propio Bunshaft, “nosotros hemos tomado la prefabricación y hemos hecho de ella un beneficio de proyecto”