Conceptos desplazados(una conversación inconclusa)

Resumen

"Los objetos de la vida no se presentan en su totalidad, sino que, en cierto modo, sólo percibimos sus fragmentos. Las cosas que nos rodean son silenciosas, (""el mundo no habla""), como mucho podemos considerar que la materia es expectante, que la materia está preparada para recibir nuestra mirada. La arquitectura me parece también silenciosa, por eso no interesa hablar de temas, sino de acuerdos y desacuerdos entre las cosas. Parece que así dejamos un espacio para quien discurre entre lo construido, donde resuene el hecho de sentirnos, a la vez, iguales y distintos. Esa esencial homogeneidad de la especie, que se cruza con la multiplicidad de cada cual, me parece casi como un espejo donde lo humano se reconoce, como un vínculo que acerca a los hombres, que nos permite dilatar nuestro ser propio, (particular), para acercarlo a lo común, (universal). ¡En nuestra diferencia, todos somos iguales!, y esto, al tiempo, es algo muy geométrico, muy arquitectónico, muy estructural. Es lo que siempre produce fascinación ante el trabajo de Donald Judd, él Hospital de Venecia de Le Corbusier, la Mezquita de Córdoba o el Economist de los Smithson, cuando sus elementos son tan iguales y tan distintos como los dedos de nuestra mano. Y es, en esa expresión de repetición y variación, donde se pueden imaginar agazapadas la ambigüedad y la posibilidad, el verdadero refugio del trabajo, donde se intercambia la fatiga por una eventual promesa: el acceso a otras figuras de la verdad. "