Estudio de biomarcadores de fibrosis en la toxicidad cardíaca asociada al tratamiento del cáncer de mama. Implicaciones diagnósticas y terapéuticas

  1. Fuente Villena, Ana de la
Dirigida por:
  1. Susana Ravassa Directora

Universidad de defensa: Universidad de Navarra

Año de defensa: 2024

Tipo: Tesis

Resumen

La quimioterapia contra el cáncer basada en antraciclinas (QTA) causa fibrosis miocárdica, una lesión que contribuye a la disfunción ventricular izquierda. En el presente estudio se empleó una cohorte de 87 pacientes con cáncer de mama de la Clínica Universidad de Navarra (CUN) que iba a ser sometida a QTA y otra cohortede de 70 pacientes del Hospital La Fe de Valencia (HULAFE) de las mismas características, que se empleó como cohorte de validación independiente. En dichas cohortes se investigó si el propéptido C-terminal tipo I derivado del procolágeno (PICP) se asocia con la disfunción del ventrículo izquierdo (DVI) subclínica a los 3 meses después de la QTA y si predice la cardiotoxicidad 1 año después de la QTA en pacientes con cáncer de mama. En los pacientes de la cohorte CUN se evaluó el ecocardiograma, la PICP sérica y los biomarcadores de daño cardiomiocítico (Troponina T [TnT] y Propéptido natriurético tipo B aminoterminal [proBNP]) al inicio, inmediatamente después de la QTA y a los 3 y 12 meses de la QTA; y en la cohorte HULAFE al inicio, a los 3 y a los 12 meses de la QTA. La DVI subclínica se definió como una reducción relativa en el strain longitudinal global (SLG) del 15% y se evaluó a los 3m post-QTA; la cardiotoxicidad se definió como una reducción de la fracción de eyección del VI (FEVI) mayor o igual al 10% a un valor por debajo del límite normal (de acuerdo con las guías del consenso europeo de 2016) y se evaluó a los 12m post-QTA. Los resultados mostraron que todos los biomarcadores aumentaron a los 3m-post-QTA en comparación con el valor basal. El PICP aumentó especialmente en los pacientes con DVI subclínica (interacción p < 0,001) y se asoció con el SLG (p < 0,001). El incremento del PICP a los 3m-post-QTA predijo la cardiotoxicidad los 12m-post-ACC (OR > 2,95, p= 0,025) en ambas cohortes, añadiendo valor pronóstico a la evaluación precoz del SLG y la FEVI. Para el estudio se contó también con una cohorte de 37 pacientes del Hospital Germans Trias i Pujol con insuficiencia cardiaca secundaria a tratamiento previo con antraciclina. En dicha cohorte se evaluó la fracción de eyección del VI (FEVI) por ecocardiograma al inicio y tras completar un año de tratamiento óptimo de insuficiencia cardiaca según las guías; se determinó también el valor de PICP basal. En dicha cohorte el PICP se asoció inversamente con la FEVI (p = 0,004), y niveles más elevados de PICP se asociaron con una menor recuperación de la FEVI. En resumen, los pacientes con cáncer de mama tratados con QTA, un aumento precoz de la PICP se asoció con una DVI subclínica precoz y predijo una reducción de la FEVI.