La dirección de la guerraConducción operacional y gobierno político de las operaciones militares

  1. Valdés Guía, Pedro
Supervised by:
  1. Montserrat Herrero Director

Defence university: Universidad de Navarra

Fecha de defensa: 13 March 2020

Committee:
  1. Jaume Aurell Cardona Chair
  2. David Thunder Secretary
  3. Guillem Colom Piella Committee member
  4. Pedro Sánchez Herráez Committee member
  5. Antonio Horta Fernandes Committee member
Department:
  1. (FFL) Filosofía

Type: Thesis

Teseo: 152451 DIALNET

Abstract

En la tesis me propongo dilucidar si la guerra, entendida como la conducción integral de las operaciones militares en un teatro determinado, tiene una consistencia lógica propia o, por el contrario, es una mera gramática al servicio de una lógica política que ha decidido expresarse con su lenguaje más extremo. Pretendo responder al dilema de si la guerra es una mera continuación de la política, cuando pone en juego sus medios más graves, o si constituye algo nuevo, “nuevo” porque introduce su propia lógica en el devenir de lo político, que no podría manejarlo conforme a los parámetros de una razón instrumental. En el primer capítulo dirijo mi mirada hacia la obra de Clausewitz, esa gran fenomenología de la guerra que propone una teoría capaz de dar razón de sus diversas y variables manifestaciones históricas. En el núcleo de esa teoría late un nuevo nivel de conducción de la guerra, al que un siglo más tarde se le denominaría por primera vez como “operacional”, encargado de dirigir como un todo las operaciones militares de un determinado teatro. En los tres siguientes capítulos de la tesis realizo un recorrido por las principales corrientes “operacionales” del pensamiento militar contemporáneo, agrupadas de acuerdo a sus concepciones de la complejidad bélica, de carácter fundamentalmente estructural, interactivo o caótico. Con este recorrido pretendo evidenciar la vinculación directa que existe entre la intensidad de esa complejidad y la consistencia lógica de esas teorías, en un crescendo que tiende a clausurar cualquier consideración meramente instrumental sobre la relación entre lo estratégico- político, externo al teatro, y lo operacional, interno al mismo. Este recorrido me lleva a cuestionar, en el quinto capítulo, la concepción gramatical de lo operacional, como mero instrumento de una lógica política, en beneficio de su propia consistencia lógica. A partir del “duelo” que, según Clausewitz, constituye la nota primera y más fundamental de la naturaleza de la guerra, he identificado su carácter “instituyente” como la clave que devuelve el ámbito de los fines al nivel operacional. La guerra tiene una lógica propia: la de un “duelo instituyente”, en tanto cada uno de sus actos de violencia integra en sí mismo dos fuerzas, como dos caras de una misma moneda, una que se opone a otra contraria, generando desorden, y una que se opone a ese desorden como fuerza de un orden. En todo enfrentamiento bélico late una intención transformadora de "la realidad enemiga", en el sentido de hacerla compatible con nuestra propia configuración existencial. Por supuesto que transformar exige penetrar y destruir, he ahí el duelo, pero con un carácter “finalista” que condiciona, desde dentro, la naturaleza y el alcance de dicha destrucción. Finalmente, basado en ese carácter “instituyente” que otorga a la conducción operacional una integridad lógica plena, concluyo la tesis con la propuesta de sustituir el esquema comúnmente aceptado de relación político-militar, el que postula su carácter instrumental o gramatical (en términos clausewitzianos), por otro de carácter “simbiótico” que respete la idiosincrasia peculiar de ambas lógicas: la bélica y la política, sin menoscabar la íntima asociación que existe entre ellas. Una simbiosis materializada según un diálogo “desigual”, en el que la lógica política no “dicta”, al no existir ni relación jerárquica ni manipulación instrumental, pero sí “domina”, pues constituye la lógica de un todo omnicomprensivo que incluye la guerra. Para articular ese diálogo desigual propongo revalorizar una de las categorías más características del pensamiento militar: la estrategia, que debe retomar su papel intermediador entre los extremos político y operacional.